En su calidad de presidente del Comité de Auditoría de ANCAP, y vicepresidente de la empresa, el Dr. Diego Durand, dispuso una auditoría sobre el ente petrolero, que tendrá como punto de partida el año 2006, según narró el jerarca a Surtidores.

Durand en calidad de abogado, amén del cargo que ostenta en el directorio, dijo estar obligado “a llevar a la justicia cualquier decisión que tenga apariencia o consecuencia de un delito”, situación que lógicamente definirá la auditoría de marras.

GRANDES DECISIONES EN ANCAP

Para el jerarca “todas las grandes decisiones de inversiones como la Regasificadora, el horno de Paysandú y particularmente el despilfarro chico para ANCAP, pero mucho para cualquier uruguayo, como comprar una avioneta o hacer una fiesta de más de 300.000 dólares” son algunas de las razones que justifican la investigación ordenada.

En materia de objetivos trazados para su gestión y la de ANCAP, “son los del Poder Ejecutivo” que Durán enumeró a grandes rasgos. “Mejorar la gestión y los resultados y como consecuencia, poder bajar los combustibles en algún momento cercano”, afirmó.

BAJAR EL PRECIO DE LOS COMBUSTIBLES

A esa premisa se preguntó “¿Cómo se hace eso?” “Dialogando con los distribuidores para alinear objetivos y ver cómo nos ayudamos mutuamente. Agregar a todos los actores que tienen incidencia en las ineficiencias de ANCAP, pensando en el bien común y de manera colaborativa” sostuvo a Surtidores.

En otra parte de la entrevista señaló que la ANCAP con la que se encontró no es la misma ya que el daño económico del pasado sigue afectando el presente y el futuro próximo de la empresa y a eso debe sumársele la pendemia mundial del COVID 19, que impactó de manera dramática en el consumo de los combustibles en todo el país. “Definitivamente el escenario pensado era otro” concluyó Duránd.