Aunque la LUC dejó (al menos por el momento) la idea de desmonopolizar el mercado de los combustibles, la alternativa planteada a fin de bajar su precio, hasta equipararlo al PPI (Precio Paridad de Importación) no parece estar tan clara.

El gobierno deberá afinar el lápiz y agudizar los números para cumplir con lo que se aprobará en el ámbito de esta ley de urgente consideración, que ya pasó por el senado y ya está en diputados.

El denominado “PPI” es un cálculo que publica la URSEA una vez al mes, en el que da cuenta del precio del combustible en el hipotético caso de que este fuera importado, aunque este cálculo es realizado teniendo en cuenta el costo del combustible en el surtidor (se le agregan los impuestos, las tasas y el costo de distribución).

Así por ejemplo según el último dato de esta Unidad Reguladora, un litro de Nafta Super 95 costaría en el surtidor (de importarse) 44 pesos, diez pesos menos de lo que cuesta el refinado por ANCAP, una diferencia que el Viceministro de Industria, Walter Verri, cree tenderá a achicarse una vez que el mundo vuelva a la normalidad en un panorama “post pandemia”.

OFERTA DE PETRÓLEO HA SUPERADO AMPLIAMENTE A LA DEMANDA

“Esta es una coyuntura absolutamente excepcional que representa la realidad que se vive en el mundo, con un sobre stock de petróleo diría `histórico´, en un contexto en el que la oferta ha superado ampliamente a la demanda, debido a la pandemia mundial que se vive.  Creo que esta diferencia -una vez que el COVID comience a retraerse en el mundo y las actividades comerciales e industriales vuelvan a su cauce- se achicará hasta volver a números más normales, con una diferencia entre el PPI y el precio de venta actual, que le ofrecerá al gobierno una mayor cintura para llegar a lo que la LUC establece”, dijo Verri a Surtidores.

Para el segundo al mando del Ministerio de Industria, el primer ajuste que debe realizarse tiene que ver con los costos de ANCAP en refinería hasta La Tablada para llegar al PPI.  “Margen para ajustar en esta etapa creo que hay”, señaló.

“Luego de este análisis de costos por parte de ANCAP, hay que analizar el precio en la segunda etapa que tiene que ver con la distribución, para la que se crea en esta instancia de ley, una comisión especial.  A mi juicio la nueva LUC será beneficiosa y obligará a que ANCAP sea eficiente, manteniendo el monopolio” sostuvo Verri al portal.

EL FIN: COMBUSTIBLE MÁS BARATO

Explicó que en realidad en PPI debe calcularse tomando en cuenta el costo del combustible en boca de planta de distribución. “Ante el hipotético caso de importar combustible, la comparación debe hacerse tomando en cuenta el precio que ANCAP entrega el mismo a los distribuidores, porque luego de ello todos los costos asociados (impuestos, tasas, subsidios, márgenes de distribución, etc.) van a ser los mismos sea el combustible refinado en La Teja o importado”, puntualizó Verri.

“Justamente este ajuste al que se debe llegar en el precio en planta de distribución, es por el que no se justifica desmonopolizar el combustible. Si logramos el mismo precio del PPI, manteniendo el monopolio, tratando de que ANCAP sea más eficiente, entonces podremos tener un combustible más barato en beneficio de toda la población” aseguró el jerarca a Surtidores.

LA CADENA DE DISTRIBUCIÓN

Diez días antes de asumir (jueves 20 de febrero) el entonces Ministro de Industria designado Ing. Omar Paganini, había revelado a una delegación de la Unión de Transportistas de Carga de Combustible, su intención de liberalizarlo desde puerta de La Tablada hacia adelante (distribución), una modalidad que permite que cada sello marque el precio de acuerdo a su propio criterio comercial.

En este escenario, se perdería el criterio de “precio regulado” en todo el país, en la medida de que, de un sello a otro, el precio podría variar.

Según explicó en ese momento el futuro ministro a la delegación de UTCC, la idea era implementar que el combustible se vendiera en la planta a un precio regulado, para que luego la distribuidora se hiciera cargo del mismo y marcara el costo de venta al estacionero que considerara.

Con respecto a este punto, el entrevistado dijo a Surtidores que en el ámbito de la LUC se crea un “Comité de Expertos” que deberá justamente analizar este y todos los aspectos de la cadena de distribución, impuestos y tasas que afectan al precio final de los combustibles.

 “Nada se descarta, todo dependerá de cómo evolucione el tema, pero por el momento todo está sujeto a las recomendaciones del Comité, que deberá informar al Poder Ejecutivo para que este remita una nueva ley al Poder Legislativo. En lo que sí estamos todos de acuerdo es que el combustible debe bajar” sentenció Walter Verri a Surtidores.