Aunque supuestamente el nuevo método de fijación de precios de los combustibles en Uruguay por parte de la URSEA y aprobado por la LUC debería ser cristalino y de fácil interpretación, hasta la fecha resulta poco accesible conocer el criterio para determinar cómo será comportamiento. De todos modos, es posible pronosticar su valor  desde el próximo 1ro. de agosto a partir de diversos indicadores internacionales.

Los datos no son muy alentadores en la medida que el barril Brent (referencia para ANCAP) ha seguido subiendo desde el mes de mayo -último indicador de esta Unidad Reguladora-  en promedio un 11 por ciento.

Según el sitio https://datosmacro.expansion.com/, el promedio del crudo en ese período fue de U$S 68.53 frente a los U$S 64.81 de abril, lo que supuso un 5.7 por ciento de suba

La plataforma digital informó asimismo, que el precio del barril Brent en los últimos 12 meses experimentó un aumento de un 133.25 por ciento.

CRUDO BRENT SUBE Y SUBE

Para tener una referencia basta observar el comportamiento del petróleo en junio, cuyo promedio/barril estuvo por encima de los 73 dólares, trepando hasta U$S 76.41 al presente.

Estos números muestran -desde el último PPI de URSEA hasta el que se emitirá el próximo jueves- una suba de aproximadamente 8 dólares el barril (11 por ciento).

Las preguntas que no tienen respuesta es cómo impactará esta suba en el PPI de la URSEA y en definitiva cuánto de la misma será trasladada al precio de los combustibles por parte del Poder Ejecutivo en la suba de agosto 2021.

Si tomamos como base el precio FOB de referencia de URSEA correspondiente al PPI mayo-junio, éste fue de U$S 504.75 por un metro cúbico (mil litros), al que entonces habría que aplicarle el referido 11 por ciento de diferencia de un mes a otro por concepto de crudo.

ESCALADA DE PRECIOS

Con esta operación el metro cúbico de Nafta Super 95 rondaría los 560 dólares, con un impacto aproximado de 2 pesos sobre el costo de un litro de ese combustible.

Con este panorama una nueva suba en agosto es inminente, Resta solamente esperar el componente “político” del gobierno para determinar (si sube) el monto de la misma concatenado esto a la conveniencia de mantener esta trepada de precios, que a juzgar por el comportamiento su principal insumo, se mantendrá.