
Activar/Desactivar Leer Página
Diseñados por Rafael Lorente, se consideran “una fusión perfecta entre la arquitectura europea de los años treinta y lo mejor de la vanguardia uruguaya”.
En 1932, un año después de la creación de ANCAP el joven estudiante de arquitectura, Rafael Lorente Escudero, ingresaba a ese ente estatal en el puesto de dibujante, para convertirse años más tarde en el jefe de la División Arquitectura del Departamento Técnico de la empresa recién formada.
Encargado de esa área, el arquitecto Lorente proyectó seis edificios en la Planta La Teja, que muestran -hasta hoy- una fusión perfecta entre la arquitectura europea de los años treinta y lo mejor de la vanguardia uruguaya de esos años.
Además, Lorente diseñó las Estaciones de Servicio de ANCAP, una en la Av Arocena (Carrasco) y la segunda en la Avenida Gorlero en el corazón de la Roseevelt, Punta Del Este, cuya arquitectura de estilo es hasta hoy un clásico.
ANÓNIMAS POR NOVENTA AÑOS
Precisamente en la mañana de ayer el Ministerio de Cultura y Educación (MEC) a través de la Comisión del Patrimonio Cultural de la Nación (CPN), distinguió algunas obras de Lorente dentro de la misma Planta de La Teja, declarándolas Monumento Histórico Nacional.
La particularidad es que las construcciones de Lorente, han permanecido en el anonimato de la población en general, ya que hasta ahora solo podían ser accedidas por los funcionarios de ANCAP.
“Los edificios de la refinería -considerados desde ayer Monumento Histórico Nacional- (seis edificios blancos, sobrios y contundentes) se integran al paisaje físico en afinidad con el muelle y el barco petrolero. En este conjunto de obras se manifiestan arquitecturas manejadas con oficio por el autor quien, a través de gestos propios, conjuga elementos del repertorio expresionista, del racionalismo y del expresionismo holandés además de recoger sugestiones del propio paisaje asociado al universo náutico. El bien está integrado por Cuartelillo de bomberos, el edificio de las oficinas administrativas, la sala de bombas, el edificio de gerencia y el de laboratorios y la Central a vapor y el lugar conocido como ‘La Capilla’” informó el MEC.
EJEMPLO DE RIQUEZA PATRIMONIAL
Para la CPN esta obra del arquitecto Lorente Escudero resulta un “ejemplo excepcional de gran riqueza patrimonial, no solo por ser concebida como una de las grandes obras de infraestructura impulsadas por la administración pública en la década del 30, sino por enmarcar —en un breve periodo y en una limitada porción de área— un repertorio de arquitectura moderna de gran calidad y actualidad”.
En su alocución a la prensa, el ministro de educación, Pablo Da Silveira, dijo que el grupo de edificios “están ubicados en un predio que es industrial, diseñado para trabajar, pero a pesar de eso estaba la mentalidad de que quienes trabajaran acá merecían un entorno urbano digno y por tanto se construía con mucho cuidado y con mucha calidad”,
ESTADO CON IGUALDAD DE OPORTUNIDADES
Da Silveira resaltó que Lorente Escudero haya comenzado como estudiante de arquitectura en ANCAP en 1932, “lo que habla muy bien de la petrolera estatal y de un Estado que a lo largo de la historia se preocupó por dar oportunidades a quienes demostraban ser valiosos y creativos en distintas áreas de actividad“.
El titular de Educación y Cultura recordó que su diseño “tiene que ver con ciertas corrientes de la época y con el modernismo contemporáneo con expresiones que aparecen expresadas con muchísima calidad”.
DEJANOS TU COMENTARIO!