Que el motor no se apague y el campo no frene: la promesa cumplida del delivery de combustible

En pleno corazón productivo del país, donde la demanda de combustible puede definir el ritmo de toda una cosecha, Grupo Servicial construyó una propuesta que trasciende la venta de litros. Con nueve Estaciones de Servicio ubicadas en el departamento de Colonia, esta empresa de capitales uruguayos supo leer las necesidades del agro y transformarlas en un modelo logístico que pone al cliente en el centro.

En diálogo con Surtidores Uruguay, Andrés Jorajuría Herrera, gerente general del grupo, el servicio va más allá del despacho, ya que también implica asegurar que el productor tenga el gasoil cuando y donde lo requiera. “En los momentos de zafra, cuando más se necesita, es cuando más cuesta conseguir combustible. Nosotros trabajamos para garantizar la disponibilidad, anticiparnos a la demanda y estar siempre presentes”, explicó.

Con una zona de influencia netamente agrícola, el 70 por ciento del volumen de ventas del Grupo Servicial corresponde a gasoil, insumo esencial para el trabajo rural. Su estrategia se apoya en una flota de camiones de reparto, con capacidades que van desde los 2.000 hasta los 17.000 litros, que permiten llegar directamente a los establecimientos, incluso en zonas alejadas. Todos los vehículos están equipados con surtidores calibrados, cuenta-litros y GPS, lo que brinda trazabilidad total y confianza plena al cliente sobre lo que se entrega.

Pero más allá de la tecnología, lo que marca la diferencia es el enfoque proactivo. El equipo del Grupo Servicial mantiene un vínculo cercano con cada productor, conoce sus ciclos y anticipa sus necesidades.

“Muchos clientes están abocados a otros aspectos urgentes del trabajo, como coordinar cosechadoras o transporte, y el combustible queda para lo último. Ahí es cuando nosotros nos adelantamos, los contactamos y organizamos el suministro antes de que se vuelva un problema”, señaló Jorajuría.

Esa planificación permite operar “a tanque lleno”, incluso en picos de demanda, y mantener niveles constantes de abastecimiento en la red. A través de un mapeo de rutas y clientes, la empresa optimiza cada recorrido: si un productor solicita una carga parcial, el camión continúa hacia otros establecimientos cercanos para completar su capacidad, ahorrando tiempo, costos y asegurando eficiencia.

Actualmente, el grupo cuenta con una base sólida de 3.500 clientes corporativos habituales, muchos de los cuales confían exclusivamente en su red para abastecerse. Esta fidelidad se ha construido no sólo a fuerza de logística, sino también mediante opciones de financiamiento para productores que enfrentan altos requerimientos de gasoil durante la zafra y no siempre cuentan con el flujo inmediato para afrontarlo.

“Nuestro objetivo es estar en el lugar y en el momento en que el cliente necesita el combustible. Si logramos eso, todo lo demás empieza a funcionar”, mencionó Jorajuría. Una premisa simple, pero que asegura el éxito de Grupo Servicial.