En este contexto y a ocho días de conocerse la resolución del Gobierno para el último mes del año en materia de precios de los combustibles en Uruguay, los regalos navideños no parecerían incluir una tercera baja de precios, como sucedió en octubre y noviembre.

En setiembre el promedio del barril alcanzó los U$S 95, mientras que en octubre bajó dos dólares, para cotizar en noviembre (el mes evaluado por URSEA) los U$S 92.74.

Debe tenerse en cuenta que la compra de petróleo por parte de ANCAP para refinar, es teniendo en cuenta el promedio mensual.

Esta diferencia, casi ni moverá la aguja del galón en el Golfo (referencia de URSEA), para mantenerse en los mismos niveles de octubre y por ende no debería haber cambios en los surtidores el último mes del año, salvo que el Gobierno asuma una nueva baja, que lógicamente volvería a impactar en ANCAP, como lo ha hecho hasta el momento.

¿MÁS BENEFICIOS PARA EL TURISMO?

A pesar de esto, las autoridades se enfrentan a otro dilema: ¿Qué facilidades puede otorgar al turismo en esta materia? Aunque se ha anunciado que quienes lleguen a Uruguay en sus vehículos podrán adquirir el combustible con un 30 por ciento de descuento (pago con tarjeta), hay que aclarar que esta medida solo alcanzará a las estaciones de frontera.

Los turistas que deban repostar en Montevideo, Atlántida o Punta del Este deberán abonar $ 74.88 el litro de Nafta Super 95 (casi dos dólares), contra los 20 pesos (50 centavos) que cuesta el mismo producto en Argentina (4 veces menos) o los 37 pesos (en promedio U$S 0.934) que cuesta en Brasil (la mitad).