Hechas públicas las denuncias de Surtidores, advirtiendo sobre el contrabando de combustibles a través de los puentes internacionales a raíz del procesamiento de dos integrantes de una banda que se dedicaba  a ese ilícito, se han hecho llegar a nuestra redacción, comentarios y testimonios de situaciones similares.

En el caso de la frontera seca con Brasil, se ha constatado un franco perjuicio con los establecimientos que expenden combustibles formalmente establecidos, que pagan todos sus impuestos y cumplen con todos los requisitos de URSEA.

POR DEBAJO DEL PUENTE

Una fuente del sector de los estacioneros advirtió sobre la situación que se vive en el departamento de Artigas especialmente en la frontera con Quaraí.

“Aunque parezca algo insólito, si uno se para sobre el puente y mira hacia el río, de vez en cuando se pueden observar carros tirados por equinos repletos de bidones y tanques de gasolina, atravesando el Cuareim, que luego se vende en locales clandestinos al minoreo en la ciudad de Artigas,” señaló la fuente.

Otro allegado al sector de los estacioneros, narró que a primera hora de la mañana “es usual ver pasar por el puente carros tirados por equinos, con verdura, bebidas, bidones de combustible, etc. Inclusive hace poco pudimos constatar algo insólito; un carro que trasladaba una piscina” agregó.

10 PESOS MENOS

Lugareños de zonas fronterizas con Brasil (Artigas, Río Branco y Chuy) informaron que la diferencia de precio entre un país y otro ronda los 10 pesos por litro. “Del lado brasilero la nafta Super 95 oscila entre los 48 y 51 pesos dependiendo del sello y del día”, explicaron.

La fuente señalaba que por ejemplo la red de estaciones Atlántica ofrece los días miércoles en el Chuy, un descuento adicional de 4 pesos por litro, lo que agranda aún más la brecha,  mientras que del lado uruguayo, con la exoneración del 24 por ciento de IMESI por pago con tarjeta, el mismo litro cuesta entre 10 y 14 pesos más dependiendo de las promociones de los sellos del lado brasilero.