La deuda que mantenía ANCAP con la venezolana PDVSA por concepto de venta de petróleo, volvió al tapete la semana pasada cuando se conoció el fallo de la justicia uruguaya,  intimando a la petrolera uruguaya (en primera instancia) a pagar unos 7 millones de dólares a Alejandro Steineck, quien había oficiado como representante de EXOR (fideicomiso) y PDVSA  por la deuda, cuyo monto aproximado se había calculado en unos 810 millones de dólares.

Steineck –vinculado al Frente Amplio, partido por el que se desempeñó como Diputado suplente- había tomado contacto en 2012 con el entonces Presidente de ANCAP Raúl Sendic, ofreciéndole mediar con su representada EXOR ante PDVSA a través de un fideicomiso que pondría fin a la deuda del ente con los venezolanos.

PDVSA DA MARCHA ATRÁS

Luego de acordados los términos del fideicomiso con DC Trust, formado por EXOR conjuntamente con el banco suizo Societé Generale, la petrolera venezolana decidió dar marcha atrás y seguir las negociaciones de dicho fideicomiso a través del banco estatal de ese país, el BANDES (algo si se quiere mucho más lógico).

Esta decisión de PDVSA –según lo declarado por el propio Raúl Sendic ante la Jueza del Crimen Organizado de 1er. Turno, Dra. Beatríz Larrieu el 25 de octubre de 2017-  no fue acompañada de ninguna explicación por parte de PDVSA, acerca de los motivos por los que había dado marcha atrás en el acuerdo, alcanzado un tiempo antes.

Aproximadamente un año después (diciembre de 2014) ANCAP y EXOR alcanzaron un segundo acuerdo a través del que la compañía estatal le garantizaba exclusividad durante un año en la intermediación en los negocios con PDVSA, que, aunque generó muchas dudas en la oposición, se explicó que ANCAP le  había pedido garantías de intermediación en un futuro negocio con PDVSA, a través de un acuerdo con costo cero, en el que EXOR haría el trabajo en PDVSA convenciéndola de hacer la operación, planteos de  los términos financieros, etc.

INTERVIENE VÁZQUEZ

En julio de 2015 –ya en funciones como Presidente el Dr. Tabaré Vázquez– éste  toma la decisión de  firmar nuevo acuerdo con PDVSA para cancelar con alimentos la deuda por compra de petróleo. En este caso por un monto de 262 millones de dólares. También se conformó un fideicomiso, aunque esta vez el dinero allí volcado sería para pagar a los exportadores uruguayos.

Esta decisión de Vázquez, anulaba la firma del acuerdo entre ANCAP y EXOR en 2014, lo que a la postre llevó a que la compañía de origen paraguayo (a través de su representante en Uruguay Alejandro Steineck) presentara ante la justicia, una demanda contra el Estado uruguayo por incumplimiento del contrato firmado con ANCAP, que finalmente sentenció (en primera instancia) el pago de 7 millones de dólares a favor de Steineck.