Supergas: denuncia ante Comisión de Diputados
Su asesor letrado afirmó que “Acodike y Riogas, siendo competidores, están dentro del paquete accionario, obstruyendo su crecimiento y buscando desaparezca”.
Los cambios que se procesarán en Uruguay a partir de marzo 2023 en el mercado del supergas, ya han originado una serie de movimientos y aclaraciones por parte de las empresas, que no se conocían públicamente.
Días pasados una delegación de la empresa Megal, fue recibida por la Comisión de Legislación y Trabajo de la Cámara Baja, que escuchó de primera mano la actual situación del negocio, de cuya versión taquigráfica (click aquí para ver) surgen algunas novedades en torno a la relación de las empresas Riogas y Acodike, que se suponían en competencia, resultando ser socias o al menos accionistas por interpósitas sociedades anónimas en Megal (Kimley S.A y Gusfel S.A), según se reveló en el seno de la comisión de diputados.
40 AÑOS SIN CAMBIOS EN EL NEGOCIO
Rossana Bucheli, principal accionista de Megal y presidenta del grupo, dijo ante los legisladores que el sector lleva 40 años sin cambios “sin que nadie haga nada”. “¿Hay algún sector en el Uruguay -ganadero, textil o alimenticio- que en cuarenta años no haya cambiado nada?” se preguntó “No existe; solo en el supergás, en el que vemos que prima la estrategia: No toquen nada, no hagan nada. Quiero seguir como estamos«.
La empresaria destacó que le única que movió el mercado fue Megal al incorporar la garrafa liviana desde Noruega. “La trajimos porque, sin duda, es un beneficio enorme para la salud del trabajador porque pesa 5 kilos vacía, frente a los algo más de 12 kilos de la otra” señaló Bucheli.
DESTRUIR CRECIMIENTO DE MEGAL
A su tiempo el Dr. Jean Jacques Bragard, asesor letrado de Megal, se refirió a la situación con Riogas y Acodike. “Nosotros tenemos a Riogas y a Acodike dentro de Megal. Reitero: en un mercado de tres privados, en un mercado super regulado, los dos competidores están dentro del paquete accionario. Sobre esta situación no hay antecedentes en el mercado local, y en cualquier otro país desarrollado, con normas de defensa de la competencia serias, esto determinaría que las autoridades obligaran a desinvertir a quienes están invirtiendo en la competencia con un ánimo que no es obtener un lucro, sino de obstruir el crecimiento de Megal o, incluso, buscar que desaparezca” denunció.
El profesional reveló que el Parlamento “es el único organismo que hoy falta tomar conocimiento de esta situación. El Poder Ejecutivo está en conocimiento a través del Ministerio de Industria, Energía y Minería. La URSEA, como ente regulador, también está en conocimiento. ANCAP también está en conocimiento. El Poder Judicial está en conocimiento, mientras que el Parlamento está tomando conocimiento en este momento”.
DECISIONES BLOQUEADAS
En ese proceso de compra a varios accionistas desperdigados, en el que Bucheli obtiene la mayoría “también aparecen Riogas y Acodike comprando porcentajes accionarios hasta llegar a más del 26 por ciento. Entre los dos competidores poseen algo más eso y ese porcentaje es clave porque para poder tomar decisiones relevantes dentro de Megal se necesita una mayoría del 75 por ciento. Por lo tanto, estamos bloqueados para obtener financiamiento con los bancos, aumentos de capital. Cualquier decisión trascendente requiere que la competencia acompañe. Obviamente, no ha acompañado ninguna decisión en los últimos cinco años” subrayó Bragard.
CON LOS BRAZOS ATADOS
El letrado se preguntó ante los diputados “¿Cómo se logra entrar en el paquete accionario de Megal, siendo competencia?” En este caso, se estructuraron sociedades instrumentales. “No hablamos de Acodike ni de Riogas, sino de Kimley S.A., sociedad que es propiedad del mismo accionista argentino dueño de Riogas. Como saben, Riogas es una empresa propiedad cien por ciento de argentinos. En el caso de Acodike, se hizo a través de una sociedad que se llama Gusfel, integrada por la familia Aparikian. Para nosotros, esta situación es insólita y técnicamente inadmisible. Sin embargo, la sorpresa es que se ha tolerado, porque se ha puesto en conocimiento de las autoridades”.
“Al final, todo esto genera un perjuicio no solo a Megal en su desarrollo, sino al mercado porque lo que Rossana (Bucheli) quiere hacer en cuanto a la modernización de la empresa no puede concretarlo — tiene los brazos atados- porque el competidor tiene una política de no mover nada. Entonces, en el ámbito privado lo logra de esta forma” sentenció Bragard en la Comisión de Legislación y Trabajo de Diputados.
El organismo controlará el “abuso de posición dominante” evitando desestabilización del mercado.
Desde 2007 la petrolera cedía por contrato sus plantas haciéndose cargo del mantenimiento. Ahora pasarán al arrendatario.
Esperan sustituir actuales contratos de distribución por otros que promuevan condiciones sustentables.