Reportaje exclusivo
El Presidente de ANCAP, Alejandro Stipanicic afirmó que los inventarios disponibles son suficientes para cumplir con la demanda aún en caso de una parada imprevista de la refinería y hasta la llegada del producto importado.
Una problemática que le es común a todos los países del mundo en este momento de pandemia es el sobre stock de combustible que se está generando en todas las plantas refinadoras de crudo del mundo, en la medida de que lo producido que no venden deben almacenarlo, algo para lo que en circunstancias normales pueden responder con volúmenes de acopio razonables, pero no para la actual escasa demanda mundial de combustible.
No es el caso de los países que importan, que moderan sus pedidos “a demanda” sin obligación de compra de grandes volúmenes de combustible, aunque esta relación comercial (la importación) podría sí aparejar algunos problemas una vez pasada esta pandemia, cuando la demanda mundial sea tan grande que los países que refinan y venden correrán riesgos de quedarse sin stock o al menos haría enlentecer las entregas y por ende ocasionar posibles desabastecimientos, algo que no ocurrirá con los países que no dependen de otros para su demanda de combustible, como Uruguay.
7.800 METROS CÚBICOS DIARIOS DE COMBUSTIBLE
De todos modos en este momento, nuestro país – que refina el crudo desde 1931 con la creación de ANCAP- no escapa a la pandemia del Covid 19, que tiene como única forma de prevención de contagio, la exclusión social y la recomendación de “quedarse en casa” lo que naturalmente ha hecho disminuir la venta de combustible en niveles de un 50 por ciento para las naftas y un 20 por ciento para el Gas Oil “principalmente porque el agro mantiene su actividad en plena zafra” según dijo el Ing. Alejandro Stipanicic, presidente de ANCAP a Surtidores.
El jerarca de ANCAP explicó al portal que diariamente “se refinan en planta La Teja 50.000 barriles, de los que aproximadamente se extraen unos 7.800 m3 de todos los productos, correspondiéndole a las naftas un 31 por ciento mientras que para el Gas Oil el porcentaje llega a un 42 por ciento”.
Estos números de los que dio cuenta Stipanicic, llevados a litros; correspondería para el caso de las gasolinas, a 2.4 millones, mientras que para el caso del Gas Oil, unos 3.3 millones de litros diarios. “En el caso de las gasolinas más o menos el doble de la demanda actual” agregó el presidente de ANCAP.
¿URUGUAY PUEDE ALMACENAR EL EXCESO DE COMBUSTIBLE?
La pregunta que el mercado se hace sobre si la capacidad de almacenamiento que ANCAP posee, permitirá afrontar esta crisis sin tener que dejar de refinar (oferta sobrepasa la demanda), tiene su respuesta para Stipanicic.
“Las variables a considerar simultáneamente son la producción, los inventarios de crudo y de productos terminados y la demanda esperada: los dos primeros son conocidos, pero la demanda depende de la estrategia de salida (o recaída) de la crisis sanitaria”, sostuvo.
Agregó que “ANCAP toma todas las precauciones necesarias para asegurar el abastecimiento, ya sea con producción propia o con el complemento de producto importado, como ha sido habitual en su historia. De hecho, es usual que se importe supergás para el invierno y, salvo algún año reciente, siempre se importaba Gas Oil ya sea para consumo doméstico o especialmente para el consumo de UTE. Es frecuente el proceso de importación de productos terminados”.
En este sentido afirmó que “la regulación del caudal de producción permite administrar los inventarios de crudo a los volúmenes ya comprados (hasta junio) según la capacidad de almacenaje disponible en Terminal del Este así como de la producción de gasolinas, gasoil y supergás (junto con otros productos) para administrar tanto la demanda esperada como la capacidad de almacenamiento disponible en La Teja, en las plantas de distribución y en las Estaciones de Servicio”.
Para finalizar, y ante algunas declaraciones públicas del presidente de UNVENU, Daniel Añón en cuanto al posible desabastecimiento de Gas Oil, Stipanicic fue enfático al asegurar que “ANCAP está tomando todas las medidas necesarias, como lo ha hecho tradicionalmente, para que todos los productos estén disponibles. La política permanente de ANCAP es que los inventarios disponibles son suficientes para cumplir con la demanda aún en caso de una parada imprevista de la refinería y hasta la llegada del producto importado”.
Alejandro Stipanicic, presidente de ANCAP “el final de la crisis encontrará una empresa fuerte, reencausada rápidamente en su actividad”.
Daniel Añón: “Pensar positivamente que habrá un día después, para resurgir con más fuerza”.
Bajo el lema “Es entre todos”, el Grupo “Estaciones” Maldonado desarrolló la destacable medida ante el avance del COVID 19.