Finalmente y luego de diversas evaluaciones, análisis de la situación financiera de ANCAP y las comparativas a nivel internacional, el gobierno uruguayo decidió mantener el precio de los combustibles, tal como lo había anunciado Surtidores en su edición del 18 de enero.

La diferencia con respecto a nuestras previsiones, que tomaban en cuenta la primera quincena de enero, es que en este caso el petróleo experimentó una leve suba internacional a fines de este mes, que aunque de poca significancia, lógicamente repercutió en el costo del galón de referencia de URSEA, y por ende marcó la suba que arrojó el PPI.

SEÑALES DE LACALLE

Paralelamente a esto, el propio presidente había dado ayer en San Gregorio de Polanco, alguna señal en cuanto a mantener los precios a costo de “la espalda de ANCAP”, lo que finalmente ocurrió para el caso de las gasolinas y el gas oil.

No fue el caso del supergás que sí experimentó un aumento de 10 pesos por kilo, aunque se mantuvo la bonificación del 50 por ciento del costo de la garrafa para los hogares con tarjeta MIDES.

BUENA VENTA A UTE

En cuanto a la “espalda de ANCAP”, en este momento el ente estatal del petróleo, mantiene un buen promedio de ingresos provenientes de UTE.

Debe considerarse que la empresa consume el equivalente a un millón y medio de dólares diarios de este combustible para generar electricidad en su planta ante la sequía.