Una nueva realidad
Presidente de ANCAP, vicepresidente de UTE y estacioneros coinciden en que las estaciones tendrán que reconvertirse para sobrevivir en el futuro.
La llegada de los autos eléctricos a Uruguay, en cantidades representativas, o al menos hasta que superen la circulación de vehículos de combustibles fósiles, demorará entre 10 y 20 años. Así lo señaló el vicepresidente de UTE, Julio Luis Sanguinetti a Surtidores.
Por su parte, el presidente de ANCAP, Alejandro Stipanicic, opinó que según estudios internacionales a los que accedió, para 2050 el 70 por ciento del parque automotor en el mundo será eléctrico, como modo de reducir las emisiones de CO2 y honrar los compromisos adquiridos por varios países (Uruguay entre ellos), en el “Acuerdo de París”, quedando un 30 por ciento de vehículos que seguirán dependiendo del petróleo.
Los modelos eléctricos siguen siendo caros (la batería solamente representa el 70 por ciento de su valor) y poco prácticos en la medida de que la exigencia de carga limita su autonomía, con lo cual Uruguay no está preparado aún para esta tecnología, tanto desde el punto de vista del bolsillo de los uruguayos como en materia de accesibilidad de carga.
De acuerdo con ASCOMA (Asociación de Concesionarios de Marcas Automotores) durante 2020 fueron vendidos 30.156 unidades 0km. en Uruguay, ubicándose la marca Volkswagen en el primer lugar con 4.269 unidades vendidas, seguida de Renault con 3.959 autos y Suzuki con 3.710 modelos comercializados en 2020.
LENTO PROCESO DE TRANSFORMACIÓN
El Vicepresidente de UTE, Julio Luis Sanguinetti, cree que esta tecnología irá sustituyendo a los derivados del petróleo “aunque tardará al menos 10 o 20 años en posicionarse en Uruguay por sobre los autos de combustibles fósiles”.
“Creo que la movilidad ciudadana una vez que supere obstáculos como la autonomía o la demora en la carga completa de un vehículo -que hoy necesita tres horas- va en el sentido de la tecnología eléctrica. Por su parte los combustibles fósiles seguirán siendo utilizados por el transporte pesado de carga, de largos recorridos, los aviones, tal vez los trenes… todo lo demás irá reconvirtiéndose hacia la movilidad eléctrica y el hidrógeno” dijo Sanguinetti.
IMPORTANCIA DEL HIDRÓGENO
“En este escenario, el hidrógeno cobra especial importancia para UTE , en la medida de que para que ANCAP produzca este elemento necesita -como principal componente- de la energía, precisamente lo que la empresa ofrece” señaló el entrevistado.
“No tengo ninguna duda que el hidrógeno será utilizado en el futuro por ómnibus, taxis y en algún sector, por el transporte carretero” agregó.
Consultado acerca de cómo él vislumbraba la distribución de todos los combustibles (fósil, eléctrico e hidrógeno) y la posibilidad de “convivir” por ejemplo en las Estaciones de Servicio -el ámbito natural para surtir- narró a Surtidores que en el caso de la energía eléctrica el tema es más complicado en la medida de que las cargas podrán hacerse en la casa de los conductores al solo costo de la electricidad, aunque no descartó que sea el propio Estado a través del MIEM y la Dirección Nacional de Energía o la propia URSEA, quienes establezcan alguna reglamentación y/o tipo de “margen” (como ocurre con el combustible fósil) para los estacioneros, aunque adelantó que estos márgenes no serían tan atractivos ya que “la energía eléctrica es mucho más barata que las gasolinas y el gas oil, justamente lo que la hace atractiva, al convertirse en su principal característica y ventaja. No se justificaría un sobreprecio”, puntualizó.
Con respecto al hidrógeno, opinó que “seguramente lo distribuya ANCAP”.
EL FUTURO: MÁS SERVICIOS Y MENOS CARGA DE COMBUSTIBLE
Surtidores consultó a Pablo López, uno de los directores de la nueva estación AXION sobre Ruta 5 (Camino la Redención), quien dijo que en treinta años pasan muchas cosas. “Seguramente la estación se vaya reconvirtiendo antes por otros factores diferentes al auto eléctrico como regulaciones, puntos de entrega de compras on-line, mensajería por drones….etc. Me imagino que el número de EE.SS. se restringirá, quedando las de mayor envergadura y con más espacio dedicado a servicios y menos a recarga de combustible” indicó López.
El presidente de ANCAP, Alejandro Stipanicic, al igual que López, cree que el negocio de las estaciones deberá irse reconvirtiendo hacia una mayor oferta de servicios, un escenario en el que el despacho del combustible, si bien seguirá siendo importante, también se complemente con otros servicios. “No tengo dudas que en el futuro y cuando otras tecnologías como la eléctrica o el hidrógeno convivan con los combustibles fósiles, será cuando realmente estos establecimientos deban convertirse en verdaderos centros de servicio” dijo el presidente de ANCAP a Surtidores.
“Según ACAU (Asociación de Comercio Automotor del Uruguay http://www.acau.com.uy/) haciendo un promedio de los últimos 20 años se venden en Uruguay unas 30 mil unidades anuales 0km. una tasa que parecería podría llevar un buen tiempo recomponer toda la flota hasta una sustitución significativa y un escenario en el que la tecnología eléctrica se posicionara por encima del combustible fósil” señaló.
ALIANZAS CON REFINERÍAS DE LA REGIÓN
En otro aspecto, Stipanicic opinó que las refinerías en el mundo tal y como las conocemos “van a comenzar a cambiar en los próximos 15 años, aunque seguirán siendo necesarias ya que detrás de ellas está toda la industria del plástico, al menos hasta que la química molecular no tenga un desarrollo importante, el plástico seguirá dependiendo del petróleo”.
En este escenario y pensando en el futuro, el jerarca sostuvo que “las refinerías como la de La Teja cobrarán una gran importancia por ser de dimensiones relativamente pequeñas y ofrecer gran flexibilidad, con una diversidad de unidades de proceso”.
“Justamente pensando en lo que se viene, creo de suma importancia establecer alianza con las refinerías de la región a fin de complementar activos” agregó.
LA ESTACIÓN DEBERÁ RECONVERTIRSE PARA SOBREVIVIR
Consultado sobre su visión en torno al negocio de la distribución secundaria (EE.SS.) ante los cambios que emanarán de la tecnología eléctrica y eventualmente el hidrógeno, precisó que estos establecimientos deberán reconvertirse en verdaderos “Centros de Servicios”.
“Creo que la recarga de combustible fósil como negocio central de la Estación de Servicio, deberá ir cambiando, apuntando a ofrecer servicios como la recarga de energía eléctrica, la recarga de hidrógeno, el combustible que a mi juicio le ganará a las baterías, sobre todo en transporte pesado, microbuses, ómnibus, camiones y utilitarios grandes” señaló.
¿BONIFICACIONES PARA ESTACIONES POR CARGA ELÉCTRICA?
Quien también se refirió al tema fue Daniel Añón, propietario de la estación ANCAP sobre la Rambla y Amazonas, quien además ostenta el cargo de presidente de UNVENU.
“Una vez que la tecnología eléctrica comience a incursionar en el mundo en forma realmente significativa, los estacioneros deberemos repensar nuestro negocio concienzudamente, ya que es muy posible que una gran parte de los clientes de la estación que se hayan pasado a coches eléctricos, carguen los mismos en sus casas” sostuvo Añón
Para el operador del sello ANCAP, muy posiblemente otros establecimientos como los Shoppings, los grandes Supermercados, etc. ofrecerán carga en forma gratuita, “lo que naturalmente desalentará la concurrencia a las Estaciones de Servicio”.
Añón cree que tal vez se podría llegar a un acuerdo con UTE o con la autoridad pertinente, de tal modo de que la estación que ofrezca carga eléctrica, reciba algún tipo de bonificación, aunque aclaró que esta situación aún no se ha planteado.
La nación nipona como Uruguay, son garantes del “Acuerdo de París”
Se apunta a incorporar vehículos eléctricos utilitarios de “última milla” para bajar emisiones de CO2 en Uruguay.
Se incorpora un nuevo concepto, el de las “Estaciones de Bandera Blanca”