Con gran preocupación el mundo vivió ayer el ataque de las fuerzas rusas sobre Ucrania. La escalada disparó la cotización del Brent por sobre los 105 dólares y al alza día a día, con la particularidad de tener que retrotraernos a setiembre de 2014 para encontrar un barril por sobre los 100 dólares.

Más allá de las consideraciones o de análisis, desde Surtidores ya habíamos alertado sobre esta situación en nuestra columna del martes 15 de febrero, con los anuncios de JP Morgan con respecto a la “explosión” del precio del crudo en el mundo.

La situación en esa zona del mundo tiene repercusiones sociales, geopolíticas, humanas, económicas, etc. a las que se le debe sumar el petróleo, cuyos mercados especulativos marcan las tendencias de su precio.

El impacto de un barril acercándose a los 110 dólares en Uruguay, podría determinar una suba importante de los combustibles el próximo 1ro. de marzo, reflejado en el PPI de URSEA que cierra el sábado 26 de febrero, aunque según manifestaciones del presidente de ANCAP Alejandro Stipanicic, la empresa tiene respaldo para mantener los precios actuales.

Stipanicic dijo a medios de prensa que “ANCAP tiene margen para no incrementar el precio de los combustibles a pesar del aumento del valor del barril de crudo”. La decisión, no obstante “queda en manos del Poder Ejecutivo”, sostuvo.

OPTIMISMO DE ANCAP

El jerarca se mostró optimista con que los negocios conexos de ANCAP, así como el buen volumen de venta que maneja el sello en Uruguay con una participación del 60.3 por ciento del mercado a través de 282 estaciones, ayuden a mantener el precio de los combustibles.

Además recordó la colocación de ALUR, de 4.000 toneladas de biodiésel de aceite de canola con destino a la Unión Europea, operación que se realizó mediante de la intermediación de la compañía Trafigura, que ya había vendido gas oil a ANCAP en ocasión de los inconvenientes en la refinería cuando se apagó el horno.

En ese sentido, el presidente de ANCAP indicó que se negocian nuevas ventas y que se abre la posibilidad de mantener operativa la planta de Capurro.