El bajo precio de los combustibles en la República Argentina, ha llevado a fomentar una nueva modalidad de contrabando desde ese país a la ciudad de Salto.

Fuentes del sector de los estacioneros, revelaron a Surtidores que diariamente hay personas que pasan más de seis veces por el puente internacional (muchos inclusive que viven del lado argentino) transportando combustible para su reventa en estaciones clandestinas.

“Para que te des una idea, por día logran ganancias de entre 10 y 12 mil pesos, debido a la gran diferencia de precio entre ambos países”, aseguraron.

GAS OIL PARA EL AGRO

La modalidad es traer el combustible en vehículos, algunos acondicionados con tanques especiales para una mayor carga, y entregarlos en bocas barriales de expendio, generalmente en las zonas más alejadas del centro de la ciudad.

La fuente inclusive reveló a Surtidores, que “además de las gasolinas, se contrabandea gas oil a menor costo que en Uruguay, para las chacras, empresas de transporte, etc.”

TRES MODALIDADES DE CONTRABANDO

Surtidores recogió la opinión de Federico Acosta, operador de una estación del sello ANCAP en la ciudad de Salto, quien ha estudiado la situación en conjunto con el Centro Comercial de Salto.

“La situación en Salto es bien diferente a lo que ocurre en otros departamentos. El contrabando de combustible llega por tres vías, los que cruzan el puente en sus vehículos aprovechando a llenar el tanque y hacer compras personales, quienes vuelven con bidones y una tercera categoría que son quienes realmente nos hacen daño, que cruzan con vehículos adaptados con tanques especiales en los que cargan más de 200 litros” explicó.

“Estos vehículos luego recorren los barrios y van distribuyendo el combustible que luego se fracciona en botellas o bidones y se vende al menudeo más barato, con la particularidad que cruzan el puente entre cinco y ocho veces por día” agregó el entrevistado.

Explicaba sostuvo además, que en algunos casos el combustible que se contrabandea es gas oil para tareas productivas y el transporte.

Asimismo, narró otros ejemplos de lugareños de Gualeguaychú que viajan en sus vehículos con los tanques llenos y en Salto lo venden en dólares. “Vuelven a Argentina con el olor a nafta prácticamente y con algunos dólares que luego venden al cambio blue logrando buenos dividendos”, sostuvo Acosta.

TRATAMIENTO DESIGUAL DE URSEA

“Tal vez de las cosas más negativas es la postura de URSEA, que, para los establecimientos legalmente constituidos con todo en regla, exige una serie de permisos, reglamentos para obras, etc. como me sucedió a mí, que me exigió una obra de medio millón de pesos para levantar unos tanques enterrados, y a dos cuadras de la estación se vende nafta en botellas debajo de unas chapas a 45 grados de calor, con riesgo permanente de incendio o accidentes” denunció el estacionero.

“Son cosas que uno no entiende. Se trata de un afán fiscalizador de URSEA con quienes pagamos todos los impuestos, empleamos mano de obra, con todas las garantías para nuestros clientes” concluyó.