Responsable de vestir a los funcionarios de las Estaciones de Servicio por casi cincuenta años, la empresa uruguaya FRIMA enfrentará en breve un nuevo desafío: Ser parte del proceso de cambio de los uniformes de “rebranding” de Petrobras hacia DISA.

Luis Suárez, al frente de la empresa desde 1978 cuando comenzó a confeccionar con manufactura 100 por ciento propia, uniformes recordó al portal que el lema de la empresa “es suministrar lo que los sellos indican”. Y agregó: No parecido, aun cuando el cliente pueda tener una oferta ocasional y/o regalos hay que tener una única línea de conducta en el trabajo”.

SIETE DE CADA DIEZ ESTACIONES

“Hoy en día, por la inestabilidad que produjo la pandemia, es muy difícil determinar cuánto mercado se tiene pues este sufrió muchos ajustes a la baja por lo que todos conocemos, aunque luego de un relevamiento del año pasado, encontramos que siete de cada diez estaciones de todos los sellos se contactaron con nosotros para comprar nuestros productos. Si bien el formato de compra actual es diferente al anterior a marzo de 2020, las empresas están muy cautelosas en el momento de comprar y prefieren hacerlo de a poco aunque deban repetir las compras” dijo Suárez.

Con respecto al sistema de trabajo de FRIMA, en los procesos de “cambio de imagen” de los sellos -como el inminente de Petrobras para DISA-  reveló  que la filosofía de trabajo “es esperar hasta poder conocer cuál será el manual que el nuevo sello determine para su red de estaciones. A partir de allí obtener las materias primas necesarias para proceder a la presentación”.

UNIFORMES PARA DISA

Para el caso de DISA informó a Surtidores que ya cuenta con información sobre sus uniformes. “Aunque naturalmente FRIMA está lista para este cambio, no debemos olvidar que hoy día hay más demora que lo habitual en desarrollar colores y terminaciones de telas ya que en nuestro país no hay industria textil, entonces dependemos de importar hasta las muestras primarias de colores, para definir los oficiales”, señaló Suárez.

Sostuvo que la empresa participó de todos los cambios de sello en Uruguay, desde 1978 con Shell, siempre con un mismo criterio: Las prendas en el estante para entrega inmediata, aquellas en proceso de costura para reponer las que salen del estante y materia prima suficiente como respaldo de toda la línea de producción.

ENTREGA INMEDIATA

El empresario reflexionó en cuanto a que “jamás pedimos un contrato de exclusividad pues pienso que la competencia es lo más sano, aun cuando aparezca algún competidor más liberal. La particularidad de contar con fabricación propia y estabilidad del personal, hace que podemos brindar un servicio integral, como cubrir todos los talles, garantía de los productos, que entregamos y que los mismos estén alineados en un 100 por ciento al manual de cada uno de los sellos”.

“Toda esa estructura hace que las entregas pequeñas y medianas salgan en 48 o 72 horas y las más grandes no más allá de una semana” concluyó Suárez.