A juzgar por la evolución del precio de los combustibles en el último período de 2024 y comienzos de 2025, la máxima que muchos analistas y empresas petroleras desarrollaban, a través de la que el precio de los combustibles en el mundo iba concatenado al del petróleo, parecería que definitivamente ha caído por tierra.

Según los índices que se analizan en el mercado del crudo, mientras este ha mostrado aumentos en el costo del barril, el reflejo en los refinados ha sido negativo.

NIVEL MÁS BAJO DESDE NOVIEMBRE 2024

Por ejemplo en el viejo continente, según difunde el último Boletín Petrolero de la Unión Europea (marzo 2025) el precio de los carburantes muestra su quinta semana consecutiva de caídas, con una baja acumulada 2025 de 0,7 por ciento para el diésel y 0,6 por ciento para el caso de las gasolinas, siendo “el nivel más bajo desde noviembre 2024” según consigna el informe.

Esta realidad naturalmente derrama en todo el mundo, incluyendo los mercados referencia de Uruguay, que muestran esa leve baja internacional del galón de los refinados.

Si bien la ministra de industria Fernanda Cardona no reveló si el Poder Ejecutivo modificará o no el criterio de guiarse por el PPI de URSEA a fin de definir el PVP en el futuro o si esta decisión será mensual o bimensual, lo cierto es que (aunque en un pequeño porcentaje) abril estaría mostrando una nueva baja en el precio internacional de los refinados.

AUMENTO DE POCA SIGNIFICANCIA

De todos modos, la poca significancia del aumento, probablemente llevaría a que el Gobierno nacional no tome decisiones de modificación el próximo mes de abril para mantener los precios que rigen hoy a la espera de futuras subas o bajas.

Actualmente nuestro país sigue a la cabeza con el combustible más caro del continente y dentro del quintín más caro del mundo, con U$S 1.80 el litro de Nafta Super 95 seguido por Chile con U$S 1.452, Costa Rica U$S 1.403, México U$S 1.362 y Argentina con un costo por litro de U$S 1.122.