Para chatarra
Según el vicepresidente de la petrolera está incompleto y “tiene valor cero en términos financieros”.
Aunque en un principio la petrolera estatal, guardaba esperanzas en cuanto a que alguna empresa privada mostraría interés en adquirir el horno para la Planta de Cemento de Nuevo Paysandú, comprado por el directorio presidido por Raúl Sendic a un costo de 53 millones de dólares (según consignó el vicepresidente de ANCAP Diego Durand), la opción no prosperó.
Se supo que fue debido a la falta de interés de las empresas que participaron en la fase de diálogo competitivo de la asociación, ante lo que ANCAP decidió proceder con una subasta pública.
PIEZAS FALTANTES
Según pudo saber Surtidores, de los 286 contenedores que transportaron el mencionado horno, en 2014, 90 fueron abiertos en busca de piezas de repuesto para los otros dos que funcionan en Paysandú y Minas respectivamente.
Técnicos consultados por este medio estimaron que su armado, en caso de que se contara con todas las piezas, podría insumir a ANCAP unos 100 millones de dólares, lo que dejaría la inversión en casi 200 millones de la moneda estadounidense (se suman gastos de seguro, vigilancia, etc.) aunque esta opción -en caso de ser de interés montarlo por el ente- es inviable ya que habría que desafectar las piezas que fueron cambiadas en los otros hornos, para armar un tercero en Paysandú.
HORNO DE VALOR CERO
Diego Durand, vicepresidente de ANCAP, había manifestado al matutino EL PAÍS, que la conclusión a la que arribó el ente “es que el horno no resulta de interés para las empresas que han participado del diálogo competitivo. Decidimos sacarlo (de la licitación) porque no le ha dado valor al pliego. Vamos a avanzar en el proceso de remate para ver qué avidez hay en el mercado y ahí se decidirá el destino final”.
Consideró que “a uno le genera impotencia que haya pasado tanto tiempo, que se haya gastado tanto dinero en ese horno y que hoy lo tengamos que sacar a remate. Primero fue una inversión, luego fue a costo y ahora en los libros contables de ANCAP el horno tiene valor cero en términos financieros”.
¿QUÉ DICE EL MERCADO?
El jerarca se mostró preocupado en cuanto a la falta de interés de las “empresas interesadas en la asociación con ANCAP para explotar el horno”.
“Habrá que ver qué dice el mercado, podrán usarlo para repuesto o chatarra, pero que alguien lo compre para instalarlo no creo” dijo.
“DEJARON PUDRIR EL HORNO”
La situación del horno de Paysandú, generó una dura controversia el lunes 14 de marzo de 2022, en oportunidad de la inauguración de la UTEC en Minas, cuando durante la misma se hizo presente una delegación de FANCAP, encabezada por el entonces presidente del gremio Gerardo Rodríguez, que protestaba por la situación de la planta de Minas.
El gremialista reclamó en ese momento no haber tenido una respuesta de Presidencia después de la propuesta que los trabajadores le acercaron para invertir en el cemento portland.
A su tiempo, el primer mandatario le respondió a viva voz: “están dando déficit desde hace años. Dejaron pudrir un horno y nunca te vi levantar la voz, nunca hablaste”.
Deberá pagar dos cuotas consecutivas de U$S 2.595 y $110.858, dándose por finalizado el litigio que la petrolera le había iniciado en 2021.
Está convencido que todo el ex directorio de ANCAP es culpable. Denuncia actos arbitrarios cometidos en perjuicio de la imagen, el prestigio y el normal desenvolvimiento de la actividad estatal
Se cerró el caso; el organismo absolvió de la causa al resto de los directores.